Un reactor es un cuerpo cilíndrico donde ser produce una reacción química. El skimmer, desnatador o espumador de proteínas está formado por un cuerpo cilíndrico cerrado a modo de tubo (reactor) donde se produce la reacción de mezclar el oxígeno con el agua marina.
Por la alta concentración de sales disueltas en al agua marina el oxígeno no es soluble en este medio. Por ello, las burbujas de aire ascienden hasta liberarse en la superficie sin poderse disolver en la columna de agua.
Funcionamiento básico de un skimmer
El aire es introducido en el cuerpo del reactor (skimmer) en forma de microburbujas. Una bomba de movimiento dotada de un rotor “multipala” se encarga de romper el aire tomado a través del sistema venturi instalado a la entrada de la bomba. El resultado es la emisión al cilindro que forma el cuerpo del skimmer de millones de microburbujas en forma de turbulencia que ascienden cargadas de electricidad hacia el punto más alto. Por la diferencia de cargas positivas/negativas las burbujas atraen hacia su superficie las enzimas proteicas resultantes de los procesos oxidantes de los desechos, estado previo a su transformación en residuos amoniacales.
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Debido a la insolubilidad del aire en el medio marino las microburbujas quedan atrapadas en la parte más alta del cilindro, nacimiento del vaso colector conocido como punto dulce del skimmer. La presión de las nuevas burbujas produce que estás tiendan a desbordar a través del estrechamiento interno del vaso quedando retenidas en él junto a su carga orgánica. Resulta fundamental que las burbujas producidas por el rotor “multipala” de la bomba de movimiento no sean excesivamente grandes. Si esto sucediera la tensión superficial de la burbuja rompería mucho antes de llegar a la superficie del cilindro con lo que no sería capaz de extraer los desechos orgánicos. El punto de concentración de las burbujas ascendentes en el cuerpo del skimmer señala el punto a regular para la extracción de los desechos. Es lo que se denomina “punto dulce” y es un nivel a controlar con carácter prioritario ya que determinará el nivel de humedad con el que espuma nuestro equipo. Si el nivel donde se concentran las burbujas es muy alto la espuma resultante será muy húmeda y por tanto eliminaremos gran cantidad de elementos químicos de importancia del agua como puedes ser los oligoelementos, los aminoácidos y las vitaminas. |
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Si el punto dulce estuviera muy bajo las burbujas serían incapaces de rebosar por el vaso por lo que las partículas de desecho nunca serían extraídas y quedarían atrapadas en las paredes del cuerpo interior del skimmer contribuyendo a la aparición de compuestos nitrogenados.
Todos los skimmer presentan diferentes mecanismos para la regulación del punto dulce de la espumación. Es importante entender el funcionamiento de nuestro skimmer para conseguir el mayor rendimiento del mismo.
La concentración de burbujas en el nivel superior del cilindro permite que algunas de ellas circulen hacía el punto de retorno del skimmer al acuario. Este proceso produce dos efectos negativos de diferente trascendencia en el acuario: El primero y más peligroso es la posibilidad de que estas microburbujas sean absorbidas mediante osmosis inversa por los organismos vivos, en especial por los peces pudiendo degenerar en casos de embolias de final trágico. El segundo efecto menos grave pero más visible es que estas burbujas insolubles quedan atrapadas por la decoración afeando enormemente nuestra instalación marina.
Para evitar este problema la mayoría de skimmer presentan cámaras anti retorno de burbujas o sistemas más simples de eliminación como son las cámaras de diferente índole cargadas con esponjas de foamex que retienen estas burbujas
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Beneficios del skimmer Hasta ahora hemos hablado de cómo funciona un skimmer. Pero realmente como afecta su trabajo al equilibrio biológico del acuario: En realidad el skimmer es la base en la que se sustenta todo el equilibrio físico-químico de cualquier acuario marino. La alta concentración de sales disueltas proporciona al agua salada una alta alcalinidad con lo que cualquier resto orgánico procesado a través de la oxidación en amoniaco se vuelve altamente peligroso incluso en las concentraciones más pequeñas. Si no conseguimos eliminar las enzimas proteicas del agua de nuestro acuario se transformaran irremediablemente en amoniaco. |
En las instalaciones maduras, es decir; con una colonia bacteriana suficientemente desarrollada, este amoniaco altamente tóxico y letal será transformado de forma inmediata en compuestos nitrogenados menos tóxicos. El resultado de estos procesos oxidantes correlativos es la aparición del nitrato en nuestra instalación que resulta ser la última fase del nitrógeno en instalaciones cerradas.
En aquellas instalaciones con suficiente cantidad de roca viva (sistema Berlín) la porosidad interna de las rocas permite el lento circular del agua con concentraciones de oxígeno negativas por su interior. En esta atmosfera las moléculas de nitrato son aprovechadas por las bacterias anaeróbicas para romper las moléculas del nitrato extrayendo de ellas el oxígeno que necesitan para vivir liberando el nitrógeno que es extraído del acuario por evaporación libre.
En las instalaciones con escasa cantidad de roca o donde se empleen filtros presurizados para compensar esta falta, está última transformación no se produce por lo que el nitrato se va concentrando cada vez en mayores cantidades dando como resultado un empobrecimiento de las condiciones acuáticas al comprometer la estabilidad del Kh (reserva de alcalinidad), el ph y el redox (diferencia entre oxígeno ganado y perdido como consecuencia de la acción biológica en el acuario). El redox marino está estable en torno a los 250 mV. En acuario este valor se mantiene entre los 300 y 350 mV.
Todos los restos de procedencia orgánica, incluyendo los procedentes de la alimentación y la descomposición de los cadáveres, están formados en gran parte por fosfato orgánico que es disuelto en el acuario con su descomposición. La presencia del fosfato es fuente de crecimiento de diferentes tipos de algas tapizantes e inhibe el crecimiento de los corales. Además la presencia de estas masas de algas desequilibran las concentraciones de oxígeno disuelto (redox) afectado a los carbonatos y boratos base de la reserva de alcalinidad o kH.
La descomposición de los restos orgánicos también libera en el acuario otros desechos no deseados como las gilvinas o los silicatos que enturbian, colorean y perjudican la transparencia e equilibrio del medio.
Por todo lo comentado podemos determinar que un skimmer nunca peca de ser excesivamente grande o desproporcionado si se encuentra bien regulado. . Su elección dependerá del tipo de acuario que queramos mantener. Como ejemplo sirvan los acuarios de arrecife con alta presencia de peces. En este tipo de instalación el skimmer es una pieza fundamental para poder mantener los nutrientes cercanos a los presentes en la naturaleza, que se encuentran en su mínima expresión. De otro modo nuestros invertebrados, sobre todo calcáreos verían invadidos sus territorios por colonias de algas mejor dotadas para vivir en estas pobres condiciones acuáticas. Los corales además presentan menos resistencia ante estas invasiones al ser seriamente perjudicadas sus necesidades más básicas como es la de una insuficiente presencia de reserva alcalina lo que les impide ligar el carbonato cálcico imprescindible para la construcción de sus esqueletos coralinos.
El skimmer y el ozono
La base de la destrucción y desaparición de los desechos orgánicos en el acuario son los procesos oxidantes llevados a cabo por las colonias nitrificantes que intervienen consumiendo oxígeno en su transformación.
A través del uso del ozono introducimos una molécula más de oxígeno con lo que los procesos oxidantes se ven acelerados pudiendo reconocer su acción por un mayor nivel de transparencia en el agua al presentar menor cantidad de partículas disueltas en suspensión.
Por tanto el ozono es recomendable de ser empleado en aquellas instalaciones con alta carga biológica donde es complicado mantener por unos medios estándar los niveles de redox y alcalinidad. Este equilibrio se ve comprometido normalmente por zonas de estancamiento entre la decoración donde quedan atrapadas y amontonadas las partículas de origen orgánico, siendo descompuestos y transformadas en residuos de origen nitrogenado (amoniaco)
El ozono permite aumentar este redox compensando el oxígeno eliminado en los procesos nitrogenados y logrando mantener por tanto de forma artificial pero estable el equilibiro en el acuario.
Por lo comentado podemos entender que habrá instalaciones marinas que por sí mismas puedan mantener las concentraciones de oxígeno pero existirán otras donde si no es por ayuda del ozono este equilibrio será imposible de conseguir.
Como aplicamos el ozono
La molécula extra de oxígeno es igualmente insoluble en el agua marina por lo que el ozono debe ser introducido en el acuario a través del venturi de entrada a la bomba de movimiento y expulsado en forma de microburbuja al cuerpo del skimmer (reactor). A lo largo de la ascensión esta molécula se irá mezclando poco a poco con el agua impidiendo por tanto que llegue de forma libre y letal al acuario. Aunque esta mezcla se produce de forma efectiva en el cuerpo del skimmer es recomendable controlar periódicamente el ozono residual presente en el acuario y aplicar pequeñas fuentes de carbón activado en la salida del skimmer para eliminarlo.
Debido al aumento del redox presente en el agua marina observaremos que los skimmers dotados de equipos de ozono retiran menos desecho que aquellos que no portan este suplemento. Ello es debido mayoritariamente a que existen menos restos orgánico por disolver al ser sintetizados por las cepas bacterianas a mayor velocidad.
El ozono además de fuente de oxígeno es un elemento letal que debe ser aplicado con precaución al acuario. Para no sobrepasar su presencia tolerable es recomendable emplear “controladores redox” que miden la conductividad del agua. Estos controladores abren y cierran los equipos proveedores de ozono permitiendo mantener el equilibrio no tóxico en el acuario. La aplicación de ozono sin control electrónico resulta muy peligroso ya que el ozono en sí es muy urticante tanto para peces como invertebrados.
La presencia del ozono en concentraciones elevadas es letal por lo que el cuerpo del skimmer en donde se produce la reacción de mezcla actúa como elemento esterilizador al conseguir eliminar los parásitos y algas planctónicas que atraviesan la columna
En conclusión
La base de todo acuario marino depende básicamente del equilibrio físico-químico del agua. Este equilibrio se ve claramente beneficiado por la extracción prematura de las enzimas proteicas impidiendo la aparición de los compuestos nitrogenados (Amoniaco, nitrito, nitrato). La consecución de las diferentes fases del ciclo del nitrógeno comprometen la estabilidad de los parámetros químicos básicos del acuario marino: Ph y Kh.
Un acuario marino sin skimmer puede llegar a mantenerse con mucho trabajo y dedicación por parte del aficionado. Sin embargo aquellos acuarios dotados de skimmer con capacidad suficiente serán mucho más estables al no comprometer los procesos oxidantes la estabilidad de los parámetros fundamentales para la vida marina.