Introducción a los Killis (Cyprinodontiformes).

Aphyosemion australe Según se progresa en está fabulosa afición que es el mantenimiento de peces ornamentales comenzamos a descubrir nuevos géneros y nuevas especies que van a ir definiendo nuestro futuro dentro de la afición. Entre estas nuevas especies, para el aficionado cada vez menos novel, debemos citar sin lugar a dudas a los Killis, pequeñas carpas ovíparas que por su diversidad de formas y colores y sus costumbres cautivan a cualquier aficionado que se acerque por las proximidades de una de las pequeñas urnas de mantenimiento.

Los killis pueden ser definidos como animales supervivientes capaces de ser sometidos a las condiciones más duras y sobrevivir a las mismas. Pertenecen al orden de los Cyprinodontiformes el cual engloba a multitud de familias, géneros y especies con muy diversos ciclos vitales y costumbres reproductivas, todo una demostración de adaptación evolutiva.

Son especies ampliamente distribuidas pudiendo encontrar ejemplares a lo largo de todo el mundo con excepción de Oceanía y de los polos donde han ido aclimatándose a las más diversas condiciones.

Su gran dimorfismo sexual (machos de mayor tamaño) y su apabullante colorido (a excepción de las hembras que suelen ser bastante monocromáticas y en poco o nada se parecen a sus parejas) los hace muy atractivos para cualquier persona, sea o no aficionada. Además de por la facilidad de obtener puestas y sus interesantes costumbres reproductoras.

En esta pequeña introducción vamos a conocer los principales géneros de estas pequeñas carpas así como una breve descripción de sus ciclos de vida, dato que va a permitir poder establecer sus primeras clasificaciones.
 

killis anuales:

Habitan en charcas y cauces acuá- ticos que cada año se desecan con lo que provocan la desaparición de toda la fauna acuática. Más tarde y con el regreso de las lluvias y las crecidas los huevos enterrados en el sustrato, interrumpen su estado latente conocido como diapausa para eclosionar poblando nuevamente los dominios de sus progenitores.

Este ciclo vital tan corto motiva que el desarrollo de las larvas sea muy rápido y con apenas 45 días los anima-les alcancen la madurez sexual con lo que comenzarán a formar territorios y a atraer a las hembras hacia ellos.

Las nuevas puestas serán enterradas en el sustrato y los huevos fecundados quedarán entonces en estado latente a la espera de que se produzcan de nuevo las condiciones óptimas para la eclosión.

Austrolebias, Simpsonichthys o Nothobranchius son géneros representativos de los killis que podemos clasificar como anuales.

Especies no anuales:

A diferencia del grupo visto anterior-mente estas especies viven en locali-zaciones acuáticas permanentes donde se desarrollan y se reproducen.

Como el resto de killis las especies no anuales están sometidas a grandes dificultades y condiciones extremas, siendo capaces de saltar o reptar de charco en charco hasta encontrar zo-nas más adecuadas cuando comien-zan las desecaciones.

Austrolebias nigripinnis
Austrolebias nigripinnis
Pertenece: Fische Killifische
 
Nothobranchius rachovii

Nothobranchius rachovii
Pertenece: A. Geheimnisse

Aphyosemion gardneri


Aphyosemion gardneri
Pertenece: Aquarium Bourse 

Las puestas de este grupo son realizadas sobre las plantas, rocas o raíces presentes, siendo muy rápido su desarrollo dentro del cascarón. A penas dos semanas después las larvas eclosionan.

Sin embargo su desarrollo y maduración posterior es más lenta, no siendo aproximadamente y con excepciones, hasta el 5 o 6 mes cuando alcanzan la madurez sexual. Debido a la permanencia de las charcas las especies comprendidas en esta clasificación tienen una esperanza de vida de entre 2 y 3 años.

El género Aphyosemion y entre sus especies el Aphyosemion australe es una de las más populares entre los aficionados que se inician con estas especies y de los pocos killis que pueden ser adquiridos en los comercios especializados.

Killis Semianuales:

Este grupo es el más adaptado de los tres al ser capaces de sobrevivir, por la climatología variable, en zonas inundadas permanentes y en zonas desecadas. Sus puestas son resistentes y se desarrollan tanto sumergidas como en sustratos húmedos.

Su desarrollo es mucho más lento que los killis anuales llegando a los 60 días, no alcanzando la madurez sexual hasta pasado el segundo més.

Géneros como Fundulopanchax, entre ellos el popular Fundulopanchax gardneri, serían los más representativos del grupo.

Killis en el acuario

Encontrar killis en el comercio habitual es algo realmente complicado por no decir imposible. Lo más habitual es acercarse a alguna asociación o algún congreso donde poder adquirir nuestros primeros individuos. Además nos indicarán correctamente la especie y su procedencia, dato muy importante ya que por lo general entre los killiófilos no se suelen mezclar poblaciones.

A la hora de mantener Killis podemos decidirnos por dos opciones: Una urna de cría específica para una especie de una determinada población, la cual se indica en su nomenclatura, con escasa decoración o bien un acuario decorado, más natural, también exclusivo para una especie. Con estas especies no se suele emplear el

acuario comunitario puesto que las hembras monocromáticas son muy similares unas a otras y hace difícil poder distinguirlas además aquellas especies más tímidas serán complicadas de contemplar.

El acuario tanto en una como otra opción no requiere de ser muy voluminoso, siendo válido pequeños tanques a partir de 12 litros por pareja, siempre en función de su tamaño.

Los Killis anuales y no anuales suelen ser de pequeño tamaño, entre 3 y 7 cm. Pero hay especies semianuales que pueden alcanzar tamaños superiores con lo que el tanque será mayor. Lo mismo ocurre para grupos de killis formados por hembras y algún macho en acuarios decorados.

Debido al pequeño tamaño del tanque y a la glotonería de los killis deberemos acostumbrarnos a realizar cambios de agua frecuentes aprovechando para limpiar del sustrato o cristal restos de alimento no consumido (sobre todo si son escamas, papillas o tabletas que caen al fondo y no suponen atractivo para los animales con lo que quedarán sin consumir).

Es habitual mantenerlos sin filtro, ni calentador, ni iluminación. Por lo demás se deja al gusto de cada uno la determinación del equipamiento, con la única salvedad de mantener el acuario en perfectas condiciones.

Os recomiendo que examinéis el agua retirada con cada cambio porque es habitual colar algún que otro alevín.

La iluminación por ejemplo dependerá más de las plantas que mantengamos, especies de anubiaso microsorium pueden ser mantenidas en perfectas condiciones sin iluminación extra, con la ventaja de librarnos de las algas.

Fundulopanchax gardneri
Fundulopanchax gardneri
Pertenece: Akwafoto
 
Simpsonichthys magnificus

Simpsonichthys magnificus
Pertenece: Akwafoto

Aphyosemion australe


Aphyosemion australe
Pertenece: Kora Blox 

Alimentación

La alimentación, como para el resto de peces, es fundamental. Un buen surtido de alimento vivo, que podemos cultivar nosotros mismos, como gusanos grindall o artemia, por ser los más sencillos, son fundamentales para incitar a nuestros animales a las puestas.

Como complemento podemos ofrecer alimento congelado, disponible en tiendas especializadas, que será muy bien aceptado, al igual que preparados comerciales en forma de escamas, granulados o liofilizados.

Por último no debemos despreciar las ventajas de las papillas caseras a base de hígado, pollo o pescado con algún complemento vegetal.