Son cuatro las familias de corales que no contribuyen a la construcción y desarrollo del arrecife y que son fácilmente confundidos con corales duros. Estas familias son Milleporidae y Stylasteridae (los Hidrocorales ) y Helioporidae y Tubiporidae (Octocorales ). Aunque todas estas familias producen un esqueleto duro calcáreo, taxonómicamente no son verdaderos escleractinios y podemos encontrarlos en bibliografía “corales duros falsos “.
Cabe destacar no obstante que los géneros Millepora y Heliopora, al igual que determinados corales blandos, si que participan parcialmente en la construcción del arrecife al aportar grandes cantidades de material carbonatado a pesar de la contradicción taxonómica.
Dentro de los corales no Escleractinios, nos fijaremos en los Hidrocorales, que no poseen gran presencia en los Acuarios ni buena reputación entre los acuaristas debido a su agresividad y su dolorosa picadura.
MILLEPORIDAE, corales de fuego Los corales de fuego del género Millepora son los más comunes y reconocidos en los acuarios. En la naturaleza se encuentran presentes en una gran disparidad de hábitats y se citan como los primeros corales que colonizan arrecifes dañados. A pesar de si innata agresividad y su gran tasa de crecimiento son animales dignos de mantener al objeto de poder observar su interesante comportamiento. Lo más común es que su color oscile entre un atractivo amarillo-naranja hacia un mostaza o incluso marrón oscuro bajo una suave iluminación. Poseen unos pólipos con la apariencia de vello que producen gran escozor en contacto con la piel. Las milleporas pueden generar durante su desarrollo diferentes estructuras en función de la corriente, sin embargo en acuarios lo más común es que se desarrollen de forma incrustante o ramificada. |
Si somos capaces de acertar con el caudal de corriente apropiada, por lo general baja a moderada, podemos forzar a que mantenga una estructura plana muy atractiva.
Respecto a su mantenimiento
Las Milleporas prefieren fuertes corrientes de agua y alta iluminación. Los acuaristas que cultivan corales de fuego reconocen que el movimiento de agua es el factor limitante en su crecimiento. En cuanto a la iluminación, las Milleporas son bastante agradecidas a todas las combinaciones y colores de luz que se utilizan en acuarios siempre y cuando la intensidad sea suficiente. Los miembros de esta familia se encuentran hasta profundidades de 30 metros por ello podremos utilizar desde una fuerte luz azul hasta lámparas coloreadas del tipo VHO y HQI.
Incluso con apropiada corriente y luz, los corales de fuego deben alimentarse para sobrevivir. Sus finos pólipos son muy urticantes y están bien situados para capturar por ellos mismos plancton natural o sustitutos. Una población correcta en cuanto al número de peces alimentados de forma adecuada ya generará por si sola la suficiente materia orgánica para que los corales de fuego se alimenten.
Es interesante comentar que se ha observado que los corales de fuego crecen sobre corales vecinos con la intención de matarlos y colonizar su esqueleto muerto. Es un mecanismo muy frecuente de la Millipora alcicornis sobre las gorgonias en el caribe, ya que la forma incrustante de este coral no construye un esqueleto, utiliza el cuerpo flexible de la gorgonia como tal. Sin embargo en la práctica este asentamiento presenta cotas de supervivencia cortas debido a que las corrientes marinas suelen romper con facilidad estas estructuras. |
precisamente las gorgonias tienen esa forma flexible para soportar corrientes de agua fuertes de forma perpendicular a su superficie específica.
En un Acuario casero es interesante mantener los corales de fuego en suspensión, ya que así podemos observar las formas distintas de crecimiento que toma al variar nuestras corrientes sin la interferencia de un sustrato rocoso por el que pueda crecer.
La propagación de las Milleporas en cautividad es tan fácil que resulta inevitable.
STYLASTERIDAE
Este tipo de corales son de los denominados no fotosintéticos y se encuentran en aguas profundas. En cautividad los representan los géneros Stylaster y Distichopora. Debido a que son criaturas aposimbióticas, dependen exclusivamente de la alimentación externa, lo que los hace muy difíciles de mantener en cautividad. Por ello, se reservan para acuaristas avanzados y para el estudio e investigación sobre este tipo de corales.
Acuarios específicos que contengan solo esta especie nos ayuda a completar mejor todas sus necesidades de supervivencia, sin embargo salvo el sector de la investigación, no se tienen los conocimientos adecuados para mantener y estabilizar esta especie en cautividad.
Cabe mencionar que este tipo de corales se desarrollan en muy bonitas gamas de color, desde rosa, rojo, violeta, amarillo…Son moderadamente potentes en su habilidad para hacer daño con sus pólipos, necesitan corriente de moderada a alta y todavía no se sabe mucho sobre sus necesidades lumínicas.
Debido a la dedicación que requiere, es una especie que no se recomienda mantener en cautividad en base a los conocimientos que los investigadores vayan adquiriendo quizás en el futuro podamos disfrutar más de la belleza que nos ofrece esta especie de hidrocoral.
Ficha realizada en colaboración con Rocío Junco Fernández
Acuarista Senior con especialidad en Aguas Cálidas / Lda. Química